En la actualidad vivimos en un mundo permanentemente conectado en el que los más pequeños pueden acceder a más contenidos que nunca gracias a Internet. El mundo digital se ha convertido en un pozo sin fondo de aplicaciones, vídeos, música y juegos capaz de satisfacer incluso las expectativas más exigentes.
Como padres, nos corresponde la difícil tarea de garantizar a nuestros hijos una experiencia saludable y segura en la Red. Y una parte importante de esa responsabilidad consiste en asegurarnos de que consumen contenidos apropiados para su edad.
¿A qué nos referimos cuando hablamos de contenidos apropiados para su edad y por qué son tan importantes?
Cuando hablamos de contenidos apropiados para su edad, nos referimos a las aplicaciones, los videojuegos y otro tipo de medios digitales adecuados para un determinado grupo de edad en función del grado de desarrollo, las habilidades cognitivas, la madurez emocional y la sensibilidad emocional característicos de esa edad.
Las actividades que realizan los niños en el mundo virtual son igual de importantes que el tiempo que pasan conectados. Aunque limitar el uso que hacen de la tecnología en general es beneficioso para su bienestar, muchos padres consideran que se trata de una batalla perdida y optan por desempeñar un papel más activo en la vida digital de sus hijos. Consumir contenidos apropiados para su edad puede favorecer el aprendizaje y el desarrollo de los más pequeños y al mismo tiempo protegerles de cosas para las que su mente todavía no está preparada.
Nuestro informe sobre los hábitos digitales de las familias de 2023 ha detectado que el principal motivo por el que los padres deciden supervisar los dispositivos de sus hijos es el riesgo de que puedan estar expuestos a la pornografía u otros materiales para adultos. Los niños que acceden a contenidos inapropiados para su edad y su grado de desarrollo pueden llegar a desarrollar estrés, ansiedad, sentimientos de bochorno y vergüenza y otro tipo de pensamientos, sentimientos y conductas negativas.
Cómo elegir contenidos adecuados para tus hijos
Cuando la mayoría de nosotros éramos niños, la forma más habitual de acceder a contenidos inadecuados para nuestra edad era quedarnos despiertos viendo la televisión de madrugada y bajar el volumen para que nuestros padres no la oyeran.
Ahora que Internet y sus oscuros recovecos están disponibles en cualquier momento y desde cualquier parte, los padres tenemos que informarnos e implicarnos mucho más para proteger a nuestros hijos de esta clase de materiales cuestionables.
A continuación, te damos cinco recomendaciones para ayudarte a elegir contenidos apropiados para tus hijos:
1. Comprueba las calificaciones de edad… pero revisa siempre el contenido por ti mismo.
Al igual que en el caso de las películas, las aplicaciones y los juegos incluyen una calificación que recomienda la edad mínima que debe tener un niño para utilizarlos. Normalmente, los encargados de elaborarlas suelen ser los desarrolladores o los creadores, la tienda o el sitio web que vende el contenido y, en el caso de los juegos, las organizaciones Pan-European Game Information (PEGI) y Entertainment Software Ratings Board (ESRB).
A veces, estas calificaciones «oficiales» resultan confusas porque no siempre coinciden, y aunque pueden ser útiles a la hora de decidir qué contenidos son adecuados para tus hijos, nuestra recomendación es que las tomes como una mera orientación.
Qustodio dispone de una sección de guías de seguridad sobre aplicaciones en la que los padres pueden comprobar el contenido de aplicaciones, videojuegos y otros medios y ver recomendaciones imparciales sobre la edad de uso. Puedes obtener más información leyendo las reseñas que han dejado otros padres y consultando otros recursos, como Common Sense Media.
2. Ten en cuenta el grado de desarrollo de cada niño.
Aunque las calificaciones de edad pueden ser útiles a la hora de decidir si un contenido es apropiado para tus hijos, estas directrices no tienen por qué corresponderse siempre con la etapa de desarrollo en la que se encuentran.
La edad de desarrollo de los niños es un indicador que expresa cómo se desenvuelven a nivel social, físico, intelectual, cultural y emocional, y cada uno de estos aspectos puede diferir enormemente de su edad cronológica.
Dado que nadie conoce a tus hijos mejor que tú, es posible que tengas que utilizar tu propio criterio para decidir si un determinado contenido es adecuado para ellos o no. Por ejemplo, si su grado de madurez es mayor de lo que sugiere su edad cronológica, tal vez puedas permitir que vean vídeos dirigidos a niños algo más mayores.
3. Promueve una buena comunicación con tus hijos.
Habla con tus hijos de cuáles son sus streamers favoritos de YouTube, TikTok o Twitch. Si te interesas periódicamente por lo que hacen en Internet, podrás familiarizarte con el tipo de contenidos que les gustan y ayudarles a encontrar otros materiales similares apropiados para su edad.
Además, estas conversaciones te permitirán ofrecerles el espacio seguro que necesitan para hablar de las cosas que les preocupan y pedirte ayuda cuando encuentren algo en Internet que les haga sentir incómodos.
Si quieres fomentar una comunicación más positiva sobre la tecnología con tus hijos, también puedes plantearte la posibilidad de crear un acuerdo digital familiar.
4. Prueba el contenido tú mismo.
Aunque no siempre es posible, especialmente en el caso de los niños más mayores, revisar el contenido antes de que tus hijos accedan a él te permitirá decidir si se ajusta a los valores de tu familia y detectar los posibles problemas, como algún aspecto que no se mencione en las descripciones o que no reflejen las calificaciones de edad oficiales.
Recuerda que acompañarles mientras ven vídeos o juegan a los videojuegos es una buena forma de comprobar la idoneidad del contenido y al mismo tiempo reforzar los lazos entre vosotros. Además, de esta forma también podrás ver cómo afecta el material a su estado anímico y a su comportamiento en tiempo real.
5. Supervisa su actividad mediante los controles parentales.
No todos los niños se muestran igual de comunicativos a la hora de compartir lo que hacen en el mundo digital, por lo que no siempre es fácil asegurarse de que consumen contenidos adecuados para su edad y su grado de madurez.
Muchas familias recurren a una aplicación de control parental como Qustodio para supervisar lo que ven y leen sus hijos o los juegos a los juegan. De este modo, pueden asegurarse de que se trata de materiales apropiados y saludables para ellos y, en caso contrario, limitar o bloquear su acceso a ellos.
Qustodio te permite implicarte en el proceso de supervisión en la medida que desees. Por ejemplo, puedes:
- Permitir que tus hijos accedan a las aplicaciones, los juegos y los sitios web que has aprobado y bloquear aquellos que sean inapropiados para su edad o problemáticos.
- Supervisar su actividad de búsqueda, los vídeos que reproducen en YouTube, el uso que hacen de las redes sociales y mucho más.
- Establecer límites de tiempo para ayudarles a desarrollar una relación saludable con la tecnología y reservar momentos para disfrutar en familia.
- Recibir notificaciones instantáneas cuando accedan a algún contenido inapropiado y pausar Internet con solo tocar un botón.
Si ayudas a tus hijos a elegir contenidos apropiados para su edad, contribuirás a protegerles de las imágenes, el lenguaje y los temas para los que todavía no están preparados, y al mismo tiempo favorecerás su aprendizaje y su desarrollo.
Ahora que los niños tienen acceso a Internet las veinticuatro horas del día, asegurarse de que solo ven e interactúan con contenidos apropiados para su edad se ha convertido en un desafío para todos los padres. Dado que las calificaciones de edad oficiales no siempre son fiables, es fundamental que adoptemos un papel más activo en la vida digital de nuestros hijos.
En Qustodio esperamos que estos consejos te faciliten un poco las cosas en ese sentido. Sin embargo, al igual que las calificaciones de edad, se trata únicamente de simples recomendaciones. En última instancia, tú eres el que mejor conoce a tus hijos y quien está en mejor posición para decidir qué es lo más adecuado para los tuyos.